¿Cuánto cuesta demandar a la empresa?

Hoy vamos a hablar de un tema que no suele preocuparos hasta que toca… y, por experiencia, siempre suele ser demasiado tarde y demasiado problemático empezar a hacer números cuando la situación es irreversible.

La jurisdicción social

Lo primero que tienes que saber es que en primera instancia NO EXISTEN COSTAS EN LA JURISDICCIÓN SOCIAL. ¿Qué significa esto? Pues básicamente que demandar por esta vía es gratuito y que en ningún caso te van a condenar a pagarle el abogado a la empresa, al menos en tu primer intento. Si recurres la primera sentencia, ya la cosa cambia. 

Así que el cuento asustaviejas de «un primo mío demandó a la empresa y encima tuvo que pagarles«, es falso. Igual tu primo recurrió la sentencia pero, aún así, es bastante raro que un juez condene a un trabajador a costas judiciales, salvo que aprecie temeridad en su conducta. Vamos, que es el típico cuento que propagan las empresas para que los currantes no demanden. 

¿Necesito un abogado?

No. Es recomendable, pero no obligatorio. Cualquier trabajador puede presentar su propia papeleta de conciliación y también su propia demanda. No necesitas para nada tener un abogado, pero obviamente un abogado va a preparar el caso mucho mejor que tú y, sobre todo, va a saber qué posibilidades tienes de ganar, cómo actuar y qué puedes reclamar. Muchas veces cuando se empieza a indagar se descubren más irregularidades de las que el trabajador considera que se han cometido. Vamos, que sale a cuenta contar con un profesional para redactar la demanda… pero necesario no es. 

Lo repetimos: demandar a la empresa es completamente gratis. Cero euros. Free of charge. De verdad. Prometido. 

¿Cuánto cobra un abogado?

Pues depende del abogado, claro está. Esto es como todo en la vida, puedes contratar a Lionel Hutz o a Saul Goldman… y su tarifas no van a ser las mismas. El ICAM tiene publicadas unas tarifas orientativas, pero son eso, para orientar. Hay varias webs donde hacen una especie de presupuesto. Pero obviamente todo va a depender del caso que sea. Lo normal, cuando se reclama dinero (indemnizaciones por despido, por ejemplo), es que cobren un % de lo obtenido más una tarifa mínima. 

En cualquier caso, es vital que te busques un abogado laboralista. La abogacía tiene muchas ramas y contar con un profesional especializado en laboral puede ser decisivo a la hora de enfrentarse a la empresa. Piensa que la empresa sí va a contar con profesionales especializados en esta rama del derecho. 

No sé qué tienen estos de CGT en mi contra…

Los abogados de oficio

Es posible solicitar un abogado de oficio, es decir gratuito, siempre que se reúnan una serie de criterios recogidos en esta ley.  Básicamente no superar 2 veces el IPREM para individuos, 2’5 veces para unidades familiares con menos de  4 miembros y 3 veces para familias numerosas. 

Para solicitar un abogado gratuito en la CAM tienes que descargarte el impreso y presentarlo en los Servicios de Orientación Jurídica o en los Juzgados. En Madrid los tienes en la calle Princesa número 3, primera planta.

El problema aquí pueden ser los plazos, hay procesos como los despidos o las modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo que tienen un tiempo máximo para ser impugnados, concretamente de 20 días, por lo que tener que realizar este trámite podría suponer verse fuera de plazo y, por tanto, sin posibilidad de demandar. 

Los seguros

Hay seguros de hogar que incluyen una cobertura legal y, en caso de conflicto laboral, te devuelven hasta un máximo que suele rozar los 3.000€ de la minuta del abogado. Ojo, porque esta clausula cada vez se ve menos y los seguros tienden a eliminarla de sus pólizas… así que revisa bien que dispones de ella antes de lanzarte a la piscina. 

Otra opción son las empresas que por una cifra mensual te dan barra libre de abogados, pero precisamente baratos no son y, obviamente, tienes que llevar un tiempo mínimo para poder demandar gratuitamente. La que tenéis todos en mente ahora mismo cuesta 23,99€ al mes y tiene una carencia de seis meses. Asegúrate, eso sí, de las coberturas. No es lo mismo que te preparen el escrito que representarte en el juicio. 

Los sindicatos

Obviamente los sindicatos cuentan con sus propios servicios jurídicos y abogados laboralistas, un servicio que se presta de manera gratuita a los afiliados y afiliadas a partir de los seis meses, en el caso de CGT. Otros sindicatos tienen otras condiciones. 

Aunque no somos partidarios de que la afiliación persiga únicamente la asistencia jurídica gratuita, porque a fin de cuentas el afiliarse a un sindicato es más una cuestión de unidad y frente común que de beneficios individuales, sí que es un atractivo asociado a la misma que no podemos negar. En un hecho que la afiliación tiene un coste de 11’72€ mensuales que, además, son desgravables en la RENTA… vamos, que anualmente te salen por bastante menos que una consulta ordinaria a un abogado. 

Las ventajas de demandar a través de un sindicato presente en la empresa son que, además, contarás con la ayuda de los delegados de dicho sindicato, que posiblemente contarán con información que podrá ayudar a armar tu defensa. No siempre, obviamente, hay casos muy particulares y concretos. 

Lo que no se puede hacer es afiliarse a posteriori. Es decir, una vez que se ha producido el hecho no puedes acudir al sindicato y pedir afiliarte para obtener un abogado gratis porque, en primer lugar, no es ético y en segundo lugar, esto supondría un agravio para los afiliados y afiliadas. 

Sí se dispone de un servicio jurídico previo pago para no afiliados, obviamente. Si quieres conocer las tarifas de jurídica de la CGT, puedes consultarlas en este enlace.