4 señales de que la empresa te toma el pelo

 

Si hay algo que concederle a Comdata es, desde luego, que es la mejor empresa para ser sindicalista. Nos dan una cantidad de trabajo descomunal y, gracias a sus constantes infracciones, estamos aprendiendo derecho laboral a niveles épicos. Comdata hace que seamos mejores sindicalistas y eso es algo que hay que agradecer. Así que, como señal de amor y devoción por Comdata, hoy os traemos las 4 señales que prueban que la empresa te intenta tomar el pelo. Para compartir con vosotros todo eso que Comdata ha traído a nuestra vida. 

 

Apelan a tu compañerismo o humanidad

 

Te pongo en situación: llega un día y te coge tu coordinador o el sheriff y te dicen que a partir de mañana vas a empezar a supervisar el trabajo de tus compañeros, pero sin ser responsable de nada, solo vas a tener que revisar qué hacen y decirles algo si lo hacen mal. O te van a poner a un chavalito que acaba de entrar nuevo a aprender por el noble arte de la observación. No es que tengas que formarlo, no. Él solo va a mirar, al más puro estilo voyeur. Pero tú actúa normal. 

 

Tú, que de tonto no tienes un pelo, pues comentas que eso te parece una movilidad funcional porque lo has leído en una web anarcosindicalista muy chunga que circula por ahí. Entonces tu coordinador te mira intensamente a los ojos y te dice, con la mano en el pecho, que no, que estás confundido… que lo que él te está pidiendo es que seas compañero, ¡humano! Que a nadie se le puede negar un vaso de agua, un techo bajo el que dormir o una formación por la cara. Que tienes que ser buena persona y ayudar a tus semejantes  y que lo bueno que tiene la humanidad es que es gratis, así que no tienen que pagarte por ella. 

 

Y, claro, ¿quién no quiere ser compañero? ¿Quién no quiere ser humano? ¿Qué somos ahora? ¿Replicantes? No, no, claro que eres humano y compañero y un orgulloso trabajador de Comdata. 

Ellos también quieren trabajar en Comdata.

 

Te obligan a firmar documentos en los que no pone lo que te han contado

Esta les encanta. Un día llegan y negocian contigo algo, no sé, que durante un par de meses vas a realizar turno de noche por una circunstancia determinada o que te van a poner jornada partida durante dos semanas, que te van a ascender de categoría o que te van a nombrar heredero de la empresa… no sé, echadle imaginación que ellos van sobrados. Total, que tú dices que vale y entonces ellos te traen un documento. Un documento en el que no dice nada de lo que te han prometido o, mejor dicho, cuentan solo la parte mala de lo que te han prometido pero no la buena. Por ejemplo, pone que vas a empezar a trabajar de noches pero no dice nada de que solo durante dos meses. O pone que te cambian de funciones pero no indican que también de categoría. Y tú, claro, preguntas. Pero ellos te dicen que no le des importancia, que son solo documentos estándar que no se pueden modificar porque están impresos con sangre de unicornio y está cara. Que firmes y ya está, que lo tenéis pactado entre vosotros y que no tienes que preocuparte de nada. Lo mismo que le dijo Napoleón a Godoy en Fontainebleau. 

 

Portugal queda por allí, ¿verdad?

 

Te dicen que lo pone en tu contrato

 

Tienes un email. Corres entusiasmado a leerlo, pensando que será la respuesta a esa pregunta que hiciste hace meses pero, al llegar, te encuentras con una sorpresa: te han puesto a trabajar un festivo. Tú, desconcertado, respondes que no trabajas los festivos. Y ellos sentencian: lo pone en tu contrato.

 

Tú firmando el contrato de Comdata

 

Tú, desesperado, te vas al contrato y ves que pone que trabajas 40 horas semanales de lunes a viernes. ¡Mierda! El festivo cae en lunes. Pues te tocará trabajar… ¿no? Bueno, en tu contrato también dice que estás ahí hasta fin de obra y servicio y tú llevas dos años y aún no te has enterado de cuál era la obra o servicio determinada esa que ibas a hacer, de hecho en tu contrato ni siquiera aparece. ¡Ah! Y también dice que eres un triciclo pero tú estás haciendo funciones de motocicleta. Vamos, que el contrato dice muchas cosas y no todas son necesariamente ciertas.

 

Os desvelamos el truco de magia: aquí, además de las 40 horas semanales, tenemos que tener en cuenta también la jornada máxima anual de convenio. El convenio de Consultoría, con sus 1800 horas, está pensado para que tú trabajes 8 horas diarias de lunes a viernes, libres todos los fines de semana y festivo y te reduzcas 16 horas durante el mes de agosto por la jornada intensiva. Si haces todo tal cual, tienes tus 1800 horas cuadraditas. Es decir, que si vas a trabajar un lunes festivo y no te lo compensan, a final de años realizarás horas extraordinarias. Vamos, que es un cuento chino… pero como lo es el rollo de que tienes firmada una disponibilidad y entonces eres mi esclavo, no te pago las horas extraordinarias porque no las tenías aprobadas o tienes firmado un 24×7 así que vas a empezar a hacer noches a partir de ahora. 

 

No te pagan las cosas con su concepto real

 

Los más top son los conceptos de gratificación y actuaciones, esos son los comodines del público, los usan para todo. Una gratificación, según la RAE, es una cantidad de dinero u otra cosa que da una persona a otra como recompensa o agradecimiento por la realización de un servicio o un favor. Supongo que es la manera que tiene Comdata de agradecerte que seas su esclavo, por eso pagan la disponibilidad como gratificación. 

 

Lo de las actuaciones es de traca porque, ¿qué es una actuación? Una actuación es un trabajo realizado fuera de tu horario laboral que, curiosamente, es un concepto que se asemeja muchísimo a otro que todos conocéis porque nos duelen los dedos de escribirlo en esta página: las horas extraordinarias. ¡Sí! Las actuaciones son horas extraordinarias, pero en neolengua de Comdata prefieren llamarlas así por varias razones. La primera es que le quitan el rollo ese de ser voluntarias, que a Comdata lo de la voluntad solo les gusta cuando tu voluntad es la de trabajar gratis. La segunda es que así no tienen que cotizarlas a la Seguridad Social y pueden defraudarla y esas cosas guays que disfrutan tanto los malos de las películas de sobremesa. La tercera es que así te pueden pagar las horas extraordinarias con cantidades creativas que ellos mismo calculan y que, por alguna extraña razón, suelen estar siempre muy por debajo del valor real de una hora extraordinaria

 

Comdata convirtiendo horas extraordinarias en actuaciones.

 

La mejor respuesta posible

Comdata es el matón del colegio. El niño que hace bullying a los demás. El estilo de Comdata es tener a un grupito de sheriffs que actúan al margen de la ley, que hacen y deshacen a su antojo, que intimidan, coaccionan y acorralan al personal para conseguir lo que quieren de ellos. El estilo de Comdata es dar la callada por respuesta y sancionar a todo aquel que se atreva a llevar la contraria. Y muchas veces les sale bien porque los trabajadores desconocen por completo sus derechos, porque tienen miedo de actuar o porque no saben qué pueden hacer para defenderse. Por eso desde aquí tratamos de daros armas. Por eso siempre damos respuesta a todas las consultas que nos llegan por correo. Por eso ponemos inspecciones de trabajo cada semana. Intentamos frenar a los abusones. Intentamos impedir que la empresa se aproveche de vosotros, de vuestro desconocimiento, de vuestra buena voluntad. Porque ellos no la tienen. Así que la mejor respuesta posible contra los abusos de Comdata es pelear. Tienes armas a tu disposición, pero para poder usarlas tienes que perder el miedo y plantar cara. Miyadi Do está muy bien, pero si quieres enfrentarte a la empresa te va a tocar ser un Cobra Kai. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

También te podría gustar...

Descubre más desde CGT ZELENZA

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo